"I WILL NOT CUT MY FILM"

La censura británica le ha pedido a Emir Kusturica, uno de los GRANDES directores en vida, que corte una escena de su última película, Life is a Miracle. Parece ser que a los "censores" no les ha gustado una escena en la que un gato se abalanza sobre una paloma muerta.

Por supuesto, Kusturica se ha negado a cortar la escena y su película corre el riesgo de no ser distribuida en el Reino Unido.

¿Cómo se atreven? ¿Cómo alguien le puede pedir a un director de la talla de Kusturica que modifique una de sus obras? Yo no tocaría ni un fotograma.

Vía The Guardian.